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Prueba Ssanyong Korando G20-D Eco-glv 4×2. Un buen compromiso

Escrito por el 18/04/2013 en Pruebas Coches

Ssanyong Korando 31

Korando significa “KORean cAN DO”, y comúnmente se cree que resulta de la mezcla de las palabras en inglés: Korean-can-do, que se pueden traducir como “Los surcoreanos también pueden hacerlo”. Es una alusión a que el Korando es el primer 4×4 fabricado totalmente en Corea del Sur.

Esta cuarta generación del SUV surcoreano, presentada en 2010 y que entonces abandonaba de manera definitiva la estética del anterior Korando, cuyo origen data de 1983, de formas mucho más cuadradas y próximas a las del Jeep CJ-7 en el que se inspiró, recibe un cambio estético en forma de nueva calandra superior, manteniendo en todo lo demás la estética diseñada por los especialistas de Giugiaro, por lo que la principal novedad del coche que hoy probamos viene dada por su motor, o mejor, por la adaptación de su motor de gasolina a la utilización de GLP, un combustible que hasta la fecha, no ha dispuesto de mucho éxito por parte del consumidor español.

Estética actual

El segmento de los crossovers compactos sigue en línea ascendente, y ningún fabricante quiere perder terreno en él. Cuando la guerra de consumos está claramente instaurada en prácticamente todas las categorías del mercado, y estos pasan a ser un factor determinante a la hora de elegir vehículo, presentar un modelo que reduzca de manera ostensible el coste por kilómetro, es una formula que sin duda le ha de generar ingresos a quién la presente, y esto es lo que ha hecho Ssanyong con esta versión Bi-fuel de su Korando G20-D, cuyo corazón se mueve tanto por gasolina como por GLP.

Ssanyong Korando 94

Antes de entrar en detalles de funcionamiento, daremos un paseo alrededor del coche; de frente destacan las dos grandes rejillas, el protector plástico de bajos y los faros antiniebla, de forma romboide. El capó es alto y los espejos retrovisores destacan sus intermitentes integrados. En la vista de tres cuartos se aprecia una cintura alta y las barras de techo, que junto al frontal, le dan un aspecto alto y musculoso. Detrás, destacan sus formas redondeadas  y como única diferencia respecto a cualquier Korando G20-D Sport GT, con el que comparte terminación, solo encontramos en la parte inferior derecha del portón trasero el logo “Eco-glv”, haciendo referencia a su doble sistema de alimentación.

Ssanyong Korando 02

Amplio… para las personas

El interior, como ya es habitual en el Korando se muestra amplio y a la vez, acogedor, los asientos delanteros, de tela, cuentan con la suficiente sujeción lateral y disponen de un mullido adecuado; Al situarnos tras el volante descubrimos un cuadro con dos esferas analógicas, la izquierda para el cuenta vueltas y la derecha para el velocímetro, y entre ellas un panel digital de color naranja con indicadores de temperatura de agua, nivel de combustible, temperatura exterior y los habituales parámetros del ordenador de a bordo. Más abajo, disponemos de la mayoría de pilotos que nos indican el funcionamiento o chequeo de los sistemas. El volante lleva incorporados los mandos del sonido.

Ssanyong Korando 77

En la consola central tenemos la presencia del nuevo sistema de navegación de pantalla táctil, que incluye el lector de MP3 y DVD, el GPS, bluetooth y el control de iPhone/iPod, además de la cámara posterior; todo ello rodeado por una franja central en “carbono” y las salidas de aire, ahora con los bordes cromados, como también lo están los del doble posavasos situado entre los asientos. Precisamente junto a estos, en su parte izquierda, nos encontramos el mando para poder cambiar de un combustible a otro, un pequeño interruptor circular dotado de cinco led, en el que el superior indica si estamos circulando a gasolina (rojo) o a gas (verde), y en le que los otros cuatro nos indican el nivel del depósito de gas. Algo más atrás, el reposabrazos esconde una doble guantera que ha crecido de tamaño.

Ssanyong Korando 60

Las plazas traseras continúan en la misma línea, ofreciendo un amplio espacio para las piernas y una alta comodidad, a condición de que viajen solo dos personas, pues aunque es cinco plazas, la central no ofrece el mismo nivel de comodidad que las dos de los lados. Los asientos delanteros tienen en sus respaldos unas rejillas porta objetos, igual que la parte trasera del reposabrazos, y las puertas cuentan con un gran hueco porta objetos.

Ssanyong Korando 66

La limitación en cuanto a habitabilidad llega en el maletero, y no porque este sea pequeño, sino porque el lugar que le corresponde a la rueda de repuesto ha sido ocupado por el depósito de GLP, con lo que la rueda de repuesto pasa a ocupar un lugar importante del maletero, algo que solo podremos solucionar yendo sin rueda de repuesto y llevando en su lugar un kit repara-pinchazos.

Motor

El motor que da vida al Korando es un tetracilíndrico atmosférico de 2 litros de cilindrada, denominado e-XGi de gasolina. Entrega 149 CV a 6.000 r.p.m. y un par de 191 Nm. a 4.000 r.p.m.

Homologa un consumo mixto de 7,5 litros a los 100, con unas emisiones de 175 g/Km. de CO2.

Este nuevo motor incorpora una caja de cambios manual de seis velocidades con la que alcanza los 178 Km./h. de velocidad máxima.

Ssanyong Korando 85

Para la transformación a GLP se ha recurrido a componentes de la firma BRC Gas Equipment y la instalación ha sido realizada por la firma Ferrosite, con amplia experiencia en este tipo de transformaciones, que da como resultado un trabajo limpio y bien acabado en el que los componente del sistema de gas quedan perfectamente integrados en el interior del vano motor sin estorbar lo más mínimo el acceso al resto de elementos. Otro día hablaremos de la transmisión.

En marcha

Al arrancar y realizar los primeros kilómetros, lo primero que destaca es su baja rumorosidad, el tacto del cambio es suave y bastante preciso y la entrega de potencia muy progresiva y lineal, tanto que a veces da la sensación de soso y de no disponer de los caballos anunciados.

Tanto a bajas vueltas, donde se muestra perezoso, como a altas, en que da la sensación de que le cuesta estirar, no le terminamos de encontrar esos 150 CV que anuncia, sin embargo, en la zona media del cuentavueltas, la respuesta es clara. En el rango que va de las 2.500 a las 5.000 r.p.m. la respuesta es franca y alegre y, desde luego es donde mejor se encuentra. Por debajo, unos desarrollos largos, pensados en el consumo y por encima, una nula capacidad de sobrerégimen, le hacen perder satisfacción de conducción.

Ssanyong Korando 45

Esto no es un grave problema, pues en la práctica, son en esos regímenes medios en los que más habitualmente nos movemos y, en cualquier caso, el coche no está falto de potencia, es solo que tanta suavidad… es sosa. La electrónica a veces es “demasiado” buena y resta sensaciones.

Donde sin duda destaca es a la hora de darle al botón mágico del GLP, y destaca porque no se nota nada. Como un buen arbitro, del que lo mejor que se puede decir es que no se le ha visto, al apretar el botón y pasar de gasolina a GLP o viceversa no se produce ningún tipo de tirón o cambio de comportamiento.

Aunque varía de unos coches a otros, lo habitual es que, circulando en GLP, un motor pierda alrededor de un 5% de potencia, algo que en circunstancias normales no importa lo más mínimo, más aún, si tenemos en cuenta que con darle al botoncito y poner el motor a funcionar en gasolina, recuperamos al instante toda su potencia.

Ssanyong Korando 05

Más allá de meterle en un banco de potencia y comprobar cuanto y donde pierde caballos, lo que me gusta hacer con los coches bi-fuel es utilizarlos de manera “normal” mientras mi copiloto va “jugando” con el botón y cambiando el modo de funcionamiento, para ver si soy capaz de descubrir en todo momento y circunstancia en que modo de funcionamiento voy.

Empezando por el final, he de decir que en el caso del Korando la diferencia de potencia entre un modo u otro no varía más de la que habría entre llevar el filtro de aire limpio o sucio. En regímenes medios de funcionamiento, circulando con normalidad en carreteras de curvas o en autopista, es imposible apreciar la diferencia, y tras un rato conduciendo en el que el copiloto ha cambiado en diversas ocasiones de un modo a otro no eres capaz de descubrir si estás circulando a gas o a gasolina.

En ciudad, con las continuas arrancadas, si eres capaz de notar que el motor se muestra un poco más perezoso, de igual forma que cuando le pisamos a fondo con intención de llegar a la zona roja del cuentavueltas, situación en que a la aguja le cuesta un poco más “trepar” por la escala del tacómetro.

El ordenador de a bordo es poco fiable y va continuamente cambiando el supuesto consumo medio que llevamos y tanto te puede marcar que llevas un consumo de 6,5 litros como a los dos minutos que llevas 8,7. Lo mismo sucede con la autonomía restante… la verdad es que no fui capaz de encontrarle sentido a las indicaciones y supongo que fueran debidas a que al usar el modo a GLP, falsea los datos del calculador.

Comportamiento

Al ser esta versión 4×2, me olvidé de cualquier tipo de prueba campestre, y sus únicas aptitudes off road las habremos de limitar a una altura mínima al suelo (18 cm.), superior a la de un turismo, lo que le permitirá circular por pistas fáciles en las que nos encontremos alguna rodera con un riesgo menor de golpear los bajos.

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En autopista su comportamiento es muy bueno, y tan solo un ligero ruido aerodinámico puede llegar a molestar a velocidades por encima de las legales.

En carreteras de curvas, como se puede ver en las fotos, el balanceo no es exagerado aún llevándole al límite, y eso que las suspensiones son muy cómodas en circunstancias normales, por lo que podemos decir que el compromiso alcanzado es muy bueno. La dirección está muy asistida, y lo que resulta cómodo en ciudad o aparcando la convierte en demasiado ligera cuando “atacamos” curvas con ganas.

¿Para quién?

Esta versión del Korando resulta muy recomendable para todos aquellos que gustándole los motores de gasolina, hacen una media de kilómetros al año media-alta, ya que al precio actual de los combustibles (el GLP cuesta alrededor del 55% del precio de la gasolina), con realizar unos 60.000 Km. habremos amortizado la diferencia de casi 2.000 € que hay que pagar por esta versión bi-fuel, algo que se conseguirá en un periodo de alrededor de tres años, contando en lo sucesivo con un continuo ahorro respecto a la versión gasolina.

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Sin embargo, si realizamos más kilómetros o nos da igual que el coche sea gasolina o diesel, es mejor opción el D20T, el nuevo hermano diesel de 149 CV que homologa un consumo medio de 5,8 l/100 Km. y cuyo tacto de conducción, a pesar de entregar la misma potencia es más enérgico en todas circunstancias.

Conclusión

Con un equipamiento de seguridad que cuenta con doble Airbag delantero, airbags laterales y de cortina, así como ABS, EBD y BAS, además de programa electrónico de estabilidad ESP, sistema activo antivuelco ARP, ayuda de arranque en cuesta y aviso luminoso en frenadas de emergencia entre otros.

Una terminación agradable y a la altura del precio que pagaremos por el coche; una estética muy a la moda que se lleva hoy en día en los SUV y un motor suficientemente potente con la ventaja tanto ecológica como de ahorro que supone el disponer de la opción a gas, esta versión del Korando presenta un buen compromiso en todos los apartados y será la opción ideal que muchos estaban buscando dentro del segmento SUV.

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