Prueba Hyundai i30

Pruebas Coches

Prueba Hyundai i30

Escrito por Miguel A. Fernández el 20/08/2012 en Pruebas Coches

Más europeo, más potente, MÁS…

El i30 original, aparecido por primera vez en el Salón de Ginebra de 2007, fue un estandarte de la nueva era de Hyundai cuando se lanzó, y tan enorme fue su éxito, que pasó de ocupar el último lugar en las clasificaciones de ventas en el segmento C al puesto número seis y a captar una cuota en el sector del 4,8%. Ahora, el modelo de nueva generación viene a representar un papel importante en el aumento de la popularidad de la marca en todo el continente.

Proyectado y diseñado en el Centro técnico de Hyundai Motor Europe, en Rüsselsheim (Alemania), el i30 de nueva generación representa el modelo más reciente que Hyundai desarrolla expresamente para el mercado europeo.

A la venta en Europa desde principios de año, el i30 de nueva generación es más largo, más ancho y más bajo que su antecesor, ofrece una línea más amplia de motores, con unidades más potentes diésel (128 CV) y gasolina (135 CV), y cambios de seis velocidades, además de emisiones de CO2 que parten de unos niveles inferiores a los 100 g/Km., lo que convierte al Hyundai i30 en uno de los vehículos más eficientes del segmento C europeo.

Además, y como muestra de su sólida confianza en la durabilidad y la calidad de sus productos, Hyundai ofrece a sus clientes de Europa la mejor garantía del sector: asistencia triple durante cinco años completamente transparente. Un galardonado paquete que incluye una garantía de cinco años con kilometraje ilimitado, cinco años de asistencia en carretera y cinco años de verificaciones del estado del coche.

Diseño exterior

El nuevo i30 es la última expresión del espíritu de “escultura fluida” que impregna los nuevos diseños de Hyundai. Desde su presentación con el prototipo ix-onic de Hyundai en el Salón del Automóvil de Ginebra de 2009, la “escultura fluida” ha sido el idioma formal de todos los modelos nuevos que ha lanzado Hyundai en Europa.

Durante la presentación internacional, Thomas Bürkle, diseñador jefe del centro técnico de Hyundai Motor Europe, señaló: “Al diseñar la nueva generación del i30 utilizamos líneas marcadas y muy fluidas para esculpir un coche de aspecto atlético que transmitiera una sensación de movimiento constante, incluso parado. Hemos comunicado al coche una imagen atrevida, que transmite seguridad por medio de sus características deportivas y sus proporciones dinámicas. En este sentido, la nueva generación del i30 está muy próxima al nuevo i40, y el público reconocerá con facilidad la fortaleza del diseño del sello Hyundai en ambos modelos”.

Un elemento destacable del aspecto más deportivo del nuevo i30 es el aumento del ancho de vía. Mientras que la carrocería es 5 mm más ancha, la parte delantera y las vías traseras se han aumentado en 17 mm y 32 mm, respectivamente, desplazando las ruedas y los neumáticos hacia afuera hasta alinearlos con los pasos de rueda. Todo ello ha mejorado la estética del vehículo.

La base del parabrisas ha avanzado 26 mm y descendido 10 mm. El ángulo del parabrisas ha aumentado, lo que ha permitido reducir la resistencia aerodinámica hasta un coeficiente Cx de 0,30. El perfil del i30 también muestra unas nuevas molduras cromadas en la línea de cintura que hay debajo de las ventanillas, y las nuevas llantas de aleación de 17 pulgadas y cinco radios con inserciones cromadas, también le favorecen.

El impacto visual aumenta asimismo por las luces diurnas que flanquean la rejilla y por los faros HID. El nuevo modelo incorpora también un rasgo distintivo de Hyundai en la parte delantera: la rejilla del radiador de forma hexagonal, con posibilidad de elegir entre barras horizontales cromadas sencillas o dobles.

Habitabilidad

Aunque se ha mantenido la batalla de 2.650 mm del modelo anterior, en la nueva generación del i30, el aumento de la longitud y la anchura totales se ha aprovechado para dar más espacio a los ocupantes en el habitáculo y al equipaje en el maletero.

Los ocupantes de los asientos delanteros pueden disfrutar de 30 mm más de espacio hasta el techo, 11 mm más de espacio para las piernas y 5 mm más de espacio a la altura de los hombros. Los pasajeros de los asientos traseros ganan 14 mm de espacio a la altura de los hombros, y el acceso a los asientos traseros se ha facilitado bajando el túnel central del piso un 59% (de 133 mm a solo 54 mm).

La capacidad del maletero se ha aumentado en un 11% hasta los 378 litros (es decir, 38 litros más); la guantera del salpicadero es un 38% más amplia, el espacio destinado a botellas en las puertas delanteras ha duplicado su tamaño y ahora es de hasta 1,5 litros, y las puertas traseras disponen de nuevos bolsillos de 0,6 litros.

En lo que se refiere a refinamiento y a ruido, vibraciones y aspereza en el habitáculo, en Hyundai no dudan en reconocer que se han tenido como referencias al VW Golf, el modelo más vendido del segmento, y al Ford Focus, identificado como uno de los mejores en experiencia de conducción; además, estaban dispuestos a lograr notables mejoras en comparación con el modelo i30 anterior.

Las medidas adoptadas para mejorar el ruido, las vibraciones y la aspereza incluyen soportes de amortiguación del motor, palieres huecos, juntas más resistentes en la carrocería entre los marcos y los montantes centrales, doble capa de sellado en las puertas, más relleno de espuma en los montantes delanteros y nueva configuración de las manecillas exteriores de las puertas.

Con lo anterior, los ruidos del habitáculo se han reducido a los mejores valores de su categoría: 38 dB con el motor al ralentí, 52 dB en aceleración, 64 dB en carretera y 63,6 dB por ruido del viento.

En cuanto a equipación y nuevos “Gadget”, incluye una llave inteligente con botón de arranque/parada del motor, regulación eléctrica de 10 posiciones en el asiento del conductor, asientos delanteros con calefacción, freno de estacionamiento eléctrico y control de crucero con función de limitación de la velocidad.

La mejora del panel de instrumentos incluye “Supervisión TFT”, como en el i40, sistema de navegación opcional, situado en la parte superior del panel central, con pantalla táctil de 7 pulgadas, climatizador bizona, dobles salidas de ventilación y calefacción para los ocupantes de los asientos traseros y un techo solar verdaderamente panorámico que permite un gran aumento de la luz natural en el habitáculo, diseñado para su apertura total o parcial, que dispone de una cortinilla ajustable que lo recorre en toda su longitud. Asimismo, como opción se ofrece vidrio solar termo reflectante para las ventanillas delanteras, laterales y trasera.

Según el modelo, la nueva generación del i30 ofrece también a los compradores asiento del conductor ajustable en altura, asientos traseros abatibles en una proporción 60/40, radio RDS/CD con MP3, iPod, Aux y puerto USB, sistema de sonido de seis altavoces y un ordenador de a bordo multifunción; los acabados de los asientos y del habitáculo del nuevo i30 se comercializan en tres colores: negro, beige y azul, con opciones en tela, cuero y tela/cuero.

Mecánica

Tanto la línea diésel como la de gasolina disponen de nuevos motores más potentes, que entregan 128 CV y 135 CV, respectivamente; según las preferencias de cada mercado, el i30 se comercializará en una variedad de seis motores (tres diésel y tres de gasolina), y una gama más amplia de potencias, que oscilan entre los 90 CV y los 135 CV.

Hyundai considera que su nueva unidad diésel (“U-II” de alta eficiencia, 1,6 litros y turbocompresor de geometría variable), será el motor más popular de esta línea. Este motor de 1.582 cc, desarrolla una potencia de 110 CV a 4.000 rpm y un par de 260 Nm a 1.900 rpm, y le permite acelerar de 0 a 100 km/h en menos de 12 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 185 km/h, con un consumo de 4,0 l/100 km en el ciclo combinado oficial, o de 3,7 l/100 km en vehículos equipados con ISG.

La nueva generación de motores de gasolina GDI Gamma de 1,6 litros va equipada con el sistema GDI de inyección directa de gasolina, para aumentar la potencia y el par, reduciendo a la vez el consumo y las emisiones. Esta unidad de 1.591 cc desarrolla una potencia de 135 CV a 6.300 rpm y un par de 164 Nm a 4.850 rpm. Con este motor, el i30 acelera hasta 100 km/h en 9,9 segundos, y registra un consumo de 5,7 l/100 km (ciclo combinado) o de 5,0 l/100 km (con ISG).

La incorporación de las tecnologías de Hyundai desarrolladas con la submarca Blue Drive, optimiza la eficiencia y reduce las emisiones en la nueva generación del i30. Estas tecnologías, disponibles tanto en los modelos diésel como en los de gasolina con cambio manual, incluyen el sistema ISG (sistema integrado de arranque y parada), neumáticos de baja resistencia a la rodadura y un sistema de gestión del alternador (AMS). El nivel de emisiones de CO2, de solo 97 g/km, en combinación con un motor que desarrolla 128 CV, permiten que el nuevo i30 con motor diésel de 1,6 litros represente la mejor relación potencia-eficiencia en su categoría.

Comportamiento

Con buenos asientos que abrazan bien el cuerpo y ofrecen todas las posibilidades para sentirte cómodo, una distribución de mandos que tras unos minutos de aprendizaje caen cómodamente a mano y un nivel de acabados propio de marcas con mucho más renombre que Hyundai, la predisposición a disfrutar de la conducción llega desde el primer momento.

Los primeros metros sirven para hacerse al tacto de volante, gas, frenos y suspensión. En el caso del primero, se puede disponer de opción del innovador sistema FLEX STEER, que incluye tres modos de funcionamiento (confort, normal y deportivo), que permiten al conductor variar el nivel de asistencia de la dirección para que se adapte mejor a las condiciones de conducción del momento y a sus preferencias personales y que funciona realmente bien.

El tacto de acelerador es muy suave en todas circunstancias (demasiado en ocasiones, como veremos más adelante), los frenos responden perfectamente, encendiéndose el warning automáticamente en caso de ejecutar una frenada de emergencia y la suspensión se muestra firme pero no incomoda al pasar los típicos badenes.

La versión que tuvimos oportunidad de probar era la equipada con el motor 1.6 CRDi 128cv y cambio automático; ya en los primeros metros de autopista pudimos apreciar dos características que se mantuvieron a lo largo de toda la prueba, la suavidad y la “sosería” en la forma de entregar la potencia. Sin duda, el excelente trabajo realizado con la electrónica, que consigue que un motor de esta potencia consiga unos consumos tan ajustados, ha de ser la razón por la que esta llega de manera tan lineal, que transmite la sensación de que el coche no anda, aunque posiblemente, el cambio automático, igual de suave y con un comportamiento nada deportivo, tenga algo que ver.

A pesar de anunciar el par máximo entre las 1900 y las 2750 rpm, zona de giro en que el motor se debería sentir más lleno, lo cierto es que se muestra mucho más cómodo (si lo que queremos es “andar”), en la zona alta del cuenta vueltas, dejándole estirar hasta donde él quiera llegar para pasar a la siguiente marcha, y digo bien cuando digo “hasta donde él quiera llegar”, porque de manera inexplicable e independientemente de que circulemos con el cambio en la posición “D” de automático o seamos nosotros los que vayamos intentando seleccionar la marcha en el modo secuencial, y a pesar de llevar en ambas situaciones el pie en “la tabla”, en ocasiones cambiaba a unas 4100 rpm y en otras a casi 4500 rpm, sin que hubiera ningún factor aparente para que esto sucediera y demostrando el motor, en las ocasiones en que cambió más alto de vueltas que seguía empujando con ganas hasta ese régimen.

De igual forma, otra característica del cambio automático es su conservadurismo a la hora de reducir, no pudiendo, de ninguna manera, insertar una marcha inferior si el régimen de giro va a superar las 3800 rpm, muy lejos de la teórica zona roja situada en las 4700 rpm. y circunstancia que limita la conducción deportiva en zona de curvas.

En favor del nuevo i30, sin embargo, hay que decir que se muestra perfectamente aplomado tanto en curvas de pequeño como de gran radio, llegando a un leve subviraje si entramos realmente fuerte en una curva fácilmente convertible en sobreviraje con un poco de tacto en freno y/o gas.

Seguridad

El anterior i30 fue el primer modelo de Hyundai en recibir las cinco estrellas Euro NCAP en 2008, y este ha seguido su camino en cuanto a las últimas tecnologías de seguridad activa y pasiva para garantizar la máxima protección a sus ocupantes y otros usuarios de la carretera. Las funciones de seguridad activa incluyen ESP (programa electrónico de estabilidad), VSM (gestión de la estabilidad del vehículo), ABS (sistema antibloqueo de frenos), BAS (sistema de asistencia a la frenada), HAC (control de asistencia al arranque en pendiente) para impedir el desplazamiento hacia atrás, y ESS (señal de parada de emergencia), que activa el parpadeo de las luces de freno al detectar una frenada de emergencia.

Incorpora alumbrado LED diurno, faros HID con AFLS para optimizar la visión nocturna, en el emblema del portón trasero va montada una cámara que ofrece una visión de gran angular y ofrece una visión clara de posibles obstáculos situados detrás del vehículo.

En cuanto a seguridad pasiva la estructura de la carrocería de la nueva generación del i30 utiliza una elevada proporción de acero de alta resistencia y lleva tres nuevos travesaños ligados a los anclajes de la suspensión delantera o trasera para aumentar al máximo la rigidez. Las barras de protección contra impactos situadas en la puerta delantera se han reforzado, la zona de unión entre el montante central y el techo se ha ampliado y los paneles laterales exteriores e interiores están hechos en acero de alta resistencia.

Equipa de serie seis airbags (delanteros, laterales delanteros y de cortina), y como opción se ofrece un airbag para las rodillas del conductor.

Valoración

Diseño, acabados, equipación y prestaciones de primer nivel en su segmento y muy superiores a su antecesor, que desde su lanzamiento en 2007, ha superado las 400.000 unidades vendidas en Europa, de las que 115.000 fueron en 2010 (la cifra de ventas anual más elevada hasta la fecha de un modelo de Hyundai en Europa) y 96.300 en 2011, al compás de la drástica caída generalizada del mercado, son unas cartas de presentación inmejorables.

Por otra parte, la asistencia triple durante cinco años que ofrece Hyundai ha de seguir siendo un diferenciador valioso para la nueva generación del i30, en una clase en la que la competencia es enorme. La garantía de cinco años no tiene límite de kilometraje, la asistencia en carretera está incluida durante cinco años y los controles de comprobación del estado del coche se realizan con una periodicidad anual, para tranquilidad de los compradores y operadores de flotas, conductores de vehículos de empresa y conductores particulares.

Todo ello, ha de llevar a que el objetivo de ventas totales que se ha marcado Hyundai, superiores a las 120.000 unidades del i30 de nueva generación en Europa durante un año completo, se convierta en una realidad y, por lo tanto, convierta a este nuevo i30 en un “superhit”. Razones no le faltan.